sábado, 16 de octubre de 2010

HOMBRES, MUJERES Y BOTONES.

Botones prehistóricos.
El botón fue utilizado desde la prehistoria pero fabricado en serie desde el siglo XII. Y en sus inicios, los botones no eran sino discos decorativos que se cosían en las prendas sin la función de abrocharlas, solo como elemento de adorno. Los primeros botones como tales fueron conchas de diversos moluscos, talladas y perforadas. Datan del año 2000 aC y fueron hallados en el Valle del río Indostán. También se hacían con conchas, madera, oro, plata… Durante la Edad Media se hacían de cuerno o de cristal y solamente la gente que poseía riquezas podía darse el lujo de llevarlos.
La práctica de abotonar la ropa con botones surgió en Europa oriental. En el año 1200, los vestidos holgados y sueltos fueron reemplazados por prendas más ceñidas al cuerpo. Ni el cinturón ni las cintas, ni los imperdibles usados hasta entonces, que se perdían con harta facilidad, daban a los nuevos vestidos la estética deseada. Alguien tuvo pues la ocurrencia de coser una hilera de botones a un lado de la ropa y practicar “agujeritos” en el lado opuesto.
Independientemente de la ropa que podríamos llamar “unisex”, siempre hay una diferencia en las camisas y chaquetas para mujeres y las de los hombres. Nooooo, no son las pinzas para el pecho. Es la botonadura. En las prendas de las mujeres están colocadas a la izquierda y en las de los hombres a la derecha. ¿Cuál es la explicación?  

Pues muy lógica en cuanto la conocemos, como casi todas las cuestiones que se refieren a los comportamientos sociales. Botones al principio no existían… que diría Joda, y todas las prendas funcionaban mayoritariamente con cintas. Después de que alguien tuviera esta genial idea de crear trocitos de materiales como hueso, oro, plata… con unos agujeritos al otro lado para enlazar ambos, no pensó inicialmente en las necesidades concretas de los sexos.

De modo que la colocación de las botonaduras fue modificándose en función de para qué servía la prenda.

Una de esas modificaciones más importantes en la colocación de la botonadura se produjo cuando, como consecuencia del uso de los vestidos ceñidos, corsés y trajes largos con botonadura, se dieron cuenta que las mujeres que tenían hijos lactantes necesitaban poder abrochar y desabrochar con facilidad aquellos maravillosos vestidos, máxime cuando debido al tipo de vida y lo lejos y lo que se tardaba en volver a casa, se veían obligadas a dar varias tomas fuera del hogar.

Pues que la gran mayoría de las mujeres son diestras, tradicionalmente se colocaban al niño sobre el brazo izquierdo, debiendo guardar libre la mano derecha y así poder abrir su corpiño para dar de mamar a su hijo.
Camisa de hombre, botones a la derecha

Camisa de mujer, botones a la izquierda.
Los hombres sin embargo, tenían otras necesidades como las broncas y las cosas de la guerra, de modo que los trajes y abrigos largos debían tener la botonadura a la derecha, ya que tenían que poder abrirse con la mano izquierda, y así dejar libre la derecha para 
poder sacar la pistola o desenfundar la espada.   



Gracias a Vero del Rosario por su colaboración.


1 comentario:

  1. Anónimo18/10/10

    Hola.. me alegro que te sirva dicha información; y también que hagas mención a mi blog.
    Cariños desde Rosario, AR
    Vero

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